martes, mayo 06, 2003

Hay veces que el asombro no es suficiente...

...como hoy, al ver que Roberto Madrazo dice a los miembros de su partido que "la puerta está abierta para que se vayan los oportunistas."

¿Con qué cara? ¿Con qué autoridad moral se atreve este pillo a señalar a quien sea?

El origen de la bronca, como se sabe, está en la arbitraria conformación de las listas de candidatos a diputados plurinominales, es decir, los que se asignan a cada partido en relación a las curules ganadas en los comicios (son los más profesionales de los aviadores que se pueda concebir).

Desde luego, tales listas incluyen a los cuates, a los compadres y a los familiares. El problema es que la familia robolucionaria es muy grande. No caben todos.

Isidro Pastor, folklórico líder del PRI en el estado de México ha amenazado con la separación de los militantes mexiquenses para conformar una nueva fuerza política de estilo de los minipartidos como el de la Sociedad Nacionalista (donde salieron más ratas que en el mismo PRI) o el Liberal Mexicano.

Don Isidro, no es necesario tanto esfuerzo. Hágale como los grandes: váyase al PRD.

A que lo tratan mejor en el edificio de Monterrey que en el circo de Buenavista...

Más pronto cae un hablador...
Tanto echar veneno sobre la güera Rodríguez para venir a enterarme de que don Leonardo es amigo de mi abuelo, quien originalmente era gran cuate de Francisco Pérez Ríos, del que la güera fue pistolero.

Pérez Ríos fue líder del sindocato de la CFE por más de 20 años, en la época dorada del sindicalismo charro. Él y mi abuelo habían sido compañeros en la escuela industrial, que era algo así como un predecesor de las secundarias técnicas allá por los treinta. Otro distinguido compañero de ellos fue Alejo Peralta (lo cual explica muchas cosas).

Resulta que a la fecha, cada vez que mi papá (que es ingeniero electricista) se topa con Rodríguez Alcaíne, éste le dice "Quihóbole, cabrón, ¿cómo está tu papá?"

Dime con quién andas...

No hay comentarios.: