viernes, julio 30, 2004

El horror, el horror...

Carmen Gutiérrez Velasco era exactamente de la edad mi mamá. Al igual que Virginia, decidió optar por la vida profesional en lugar de ser un ama de casa tradicional.

La doctora Gutiérrez Velasco era cirujana egresada de la facultad de medicina de la UNAM. Había hecho una especialidad en medicina pulmonar e investigaciones sobre terapia reconstructiva pulmonar.

Fue directora del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, donde trabajó durante 10 años. Actualmente era directora de la clínica antitabaquismo de Médica Sur. En 1997 fue nombrada mujer del año.

Hace unos días, Carmen apareció muerta , su cuerpo flotando en uno de los canales de Chalco. Tenía una capucha en la cabeza, cable eléctrico alrededor del cuello y un ojo herido. Había sido secuestrada. Se dice que su famili no juntó los tres millones de pesos exigidos por los plagiarios.

Piensa en tu mamá. En tu pareja. En tu hermana. En tu compañera de trabajo. Imagina el dolor de encontrar su cuerpo torturado flotando entre la mierda. ¿Puedes siquiera atisbar la rabia, la indignación?

El niño mutilado, la madre asesinada. Todos esos secuestros me duelen. Son míos y tuyos. Cada muerto es una herida, una marca en nuestro tejido social, que es queloide y no cicatriza.

¿Cuántos muertos nos hacen falta? ¿Cuántas atrocidades? ¿Dónde está el límite, hasta dónde llega el fondo?

¿Hasta que sea tu mamá? ¿Tu niño?

Somos una nación secuestrada.

¿Qué hemos hecho para merecer esto?

jueves, julio 29, 2004

Indignación

Un niño de seis años fue devuelto por sus plagiarios tras haber sido secuestrado. Al chiquito le habían mutilado dos deditos que fueron enviados a sus padres.

¿Qué clase de enfermo es capaz de mutilar a un niño? No existe en la naturaleza bestia capaz de tal atrocidad, ni siquiera entre los escorpiones.

¿Qué le pasa a esta sociedad mexicana? ¿Se ha pudrido desde sus raíces? ¿Qué clase de criaturas estamos engendrando?

Piensa en tus hijos, en tus primos, en tus vecinitos de esa edad. ¿Podrías llegar hasta uno de ellos con unas pinzas y arrancarle un dedo? ¿Podrías soportar su llanto doloroso sin volver a soñarlo todas las noches? ¿Podrías sostenerle la mirada a su carita sin querer arrancarte los ojos de la vergüenza?

Hay monstruos entre nosotros. "There be tygers..."

Es en estos momentos, cuando se atisba la capacidad de crueldad de estos infelices, es cuando desearía que hubiera pena de muerte. Estos criminales no se van a componer con todos los años de cárcel (en el supuesto caso de que los atrapen). Y como dijo David Kimura, mi socio, me da codo mantener con mis impuestos en la cárcel a esta basura.

Asco. Me dan asco.

Pero lo peor es que caminan entre nosotros, buscando su siguiente víctima. Como se dice coloquialmente, nomás viendo a quién chingan.

Ya basta. Por favor, ¿qué culpa puede cargar cualquier persona a los 6 años?

Que alguien se apiade de todos nosotros...






martes, julio 27, 2004

Una canción para Lya

Insane Clown Posse es una de esas bandas de un solo éxito comercial que la pegan con una rola y no se vuelve a saber de ellos.

La gente de mi edad quizá recuerde una violenta canción de finales de los 90, Fuck The World, programada en radioactivo y que básicamente le mentaba la madre a todo ser que respirara oxígeno. "Fuck you/ Fuck me/ Fuck Everyone... Even if you like me/ Fuck you!!", etc.

Desde luego, era un himno para mí.

Cuando di con el disco (se lo compré a un patineto en el Chopo) me resultó bastante monótono y aburrido. Lo amontoné con el resto de mis CDs y me olvidé de él.

Hace poco, con mi nuevo interés por el hip hop, lo saqué del baúl. No es malo, quizá la bronca es que los que cantan, dos hermanos de apellido Jeckel que se visten de payasos y que además son luchadores profesionales (es decir, white trash a tope) son blancos. Y perdón, pero el hip hop no es para que lo canten los güeros.

Como sea, y antes de que divague demasiado, en su repechaje, resultó que el disco tiene una GRAN canción, más rockera que rapera, que me resultó una agradable sorpresa. Tocada con piano y guitarrita, la pieza puede ser incluso conmovedora si uno soslaya los lugares comunes dignos de Silvio Rodríguez.

OK,OK, me gustó porque soy un cursi, y se las quiero compartir. Ya no me molesten. Aquí va:

Nothing's Left

There's no story that ain't been told
There's no gimmick that ain't been sold
Ain't no ocean that ain't been swam
Ain't no JOBBER that ain't been slammed
There's no road that never been travled
There's no doctor that ain't been baffled
Ain't no thug that never cried
Ain't no preacher that never lied
There's no rumor that ain't been passed
Ain't no question that no one's asked
There's no trees that ain't been chopped
There's no bomb that wont get dropped
Ain't no paths that no one's been laid
Ain't no beast that ain't been afraid
No feat that no one can
There's no saga that never began

Ain't no snow that didn't melt
There's no punch that ain't been felt
There's no skill that no one's learned
There's no planet that He ain't turned
There's no view that never dissolved
There's no problem that ain't been solved
There's no tail that no one's told
There's no beauty that won't get old
There's no garden that the sun ain't beamed on
There's no shoulder that ain't been leaned on
There's no color that ain't been seen
Purple Red Yellow Blue Forest Green
There's no desert that ain't seen rain
Nobody here that ain't felt pain
There's no bigot that ain't been clowned
There's no treasure that I ain't found
Ain't no gate they never explored
Ain't no mother that ain't been ignored
There's no leader that ain't been lead
There's no blood that ain't been shed
There's no dish they never made
No brick they never laid
Everything left's been done before
Nothing's new, nowhere to explore

10 cosas que me hubiera gustado hacer... y que ya no podré

1) Ir de invitado al Club del Hogar ("Pues sí, don Danielito, Madaleno, verán ustedes...")

2) Ser requintista de una banda de metal.

3) Haber sido expulsado del colegio católico en el estudié fui por llegar con el pelo azul.

4) Perder mi virginidad escuchando a Led Zeppellin de fondo.

5) Ser violinista o pianista prodigio a los 6 años (véase la vocación nerd).

6) Haber sido patineto.

7) Ver en vivo a Nirvana.

8) Tener una banda punk en la universidad.

9) Beberme un whisky en las tores gemelas.

10) Haber conocido a Abel Quezada (que era amigo de mi abuelo, carajo...)

Editorial en 4 palabras

Echeverría se nos peló.

miércoles, julio 21, 2004

Siete breves

1) Una de las cosas que vale la pena hacer en vacaciones es desconectarse completamente de las noticias. Sin embargo, al volver, me he encontrado con la buena nueva de que Marta Sahagún finalmente se retira de la pre-pre-contienda presidencial.

De haber continuado en su afán trepador, seguramente le hubiera hecho más daño al país que mi general Arturo Durazo o Fidel Velázquez.

Una mujer ignorante, prepotente y arribista en la presidencia del país. Qué horrible escenario.

2) Epigmenio León salió libre hace ya un par de semanas. Felicidades.

3) El más culpable de mis placeres son las novelas de Stephen King. En Puerto Vallarta, Paco Haghenbeck me roló su última novela, Buick 8, el auto perverso. Nada que ver con el dylaniano título From a Buick 8, pero todo sea en aras de vender papel. Como sea, el maldito libro me tiene atrapado, y aunque sé que va a tener un final decepcionante y que me voy a odiar por leer best sellers en lugar de libros serios, la neta es que lo estoy gozando.

4) Está en apenas unos cuantos cines House Of 1000 Corpses, ni más ni menos que dirigida por Rob Zombie, que es uno de mis héroes. No la he visto, pero a Ira Franco le gustó y respeto mucho su opinión (y confío en su buen gusto). Ojalá alcance a verla antes de que la quiten.

5) ¡Nuevo disco de Ministry! La banda más encabronada del planeta lo vuelve a hacer.

6) La película del hombre araña, la 2a. parte, bien pudo llamarse Nosotros los pobres, en Brooklyn. Qué porquería. Estuve a punto de salirme. Ni siquiera al gran Alfred Molina logra salvarla. El araña, la neta, siempre me cayó mal por loser. Yo era más de los 4 fantásticos.

7) Ya quiero ver Hellboy...

lunes, julio 19, 2004

I'm back
El domingo a las 2 de la mañana tecleé el punto final de mi nueva novela.

Pasé unos días de incógnito en Guadalajara, alejado de cualquier distracción y aprovechando la hospitalidad de mi tío Pepe Toño para acabarla.

De hecho, de Puerto Vallarta me fui a Guanatos donde me encerré 5 días en su departamento, cerca de la Minerva, a terminarla.

Ya en casa de Paquito y Lillyan Haghenbeck intenté adelantar, pero es imposible escribir nada frente a la playa.

Como sea, ayer por la madrugada, en el último día de mis vacaciones, mientras el tío que fue mi primer roomate? andaba en una boda, logré completar el cuerpo básico de la historia. Apenas a tiempo para comprar unos regalos y tomar el avión de regreso.

[Aquí, un paréntesis: pocas cosas se comparan a poner ese punto final. has vivido con la novela durante mucho tiempo, pensando en ella, planeándola, acariciándola para limar las asperezas de la trama. Cuando llegas al punto previo al desenlace es como si iniciaras las maniobras de aterrizaje en un avión: puede salir todo bien o puedes ponerle en la madre al proyecto. Pero cuando acabas y crees que el material es bueno, no sólo quedas exhausto, sino lleno de una alegría difícil de compartir con alguien que no sea escritor(a)]

Con ésta, he escrito tres novelas. No he publicado ninguna de ellas. No ha habido suerte en los concursos (a la mejor son muy malas) pero una de ellas, Gel azul, está ahora en proceso de dictaminación mientras que la otra, El ladrón de sueños, acaba de salir de un concurso de literatura juvenil ?sin éxito? para entrar a otro.

(OK, suena patético. Pero he publicado tres libros solistas, el cuarto viene en camino...)

Esta última, El estruendo del silencio, planeo mandarla al concurso de la UPC de novela de ciencia ficción en Barcelona. Cierra en septiembre, así que hay tiempo para trabajarla.

[Otro paréntesis: por si alguien se interesa, la novela trata sobre un robot en una nave espacial biotecnológica que adquiere consciencia. O algo así...]

Acabar de escribir es la mitad del proceso. Pulirla, trabajarla, ponerla a punto es la segunda mitad. Acaso la más difícil. Es como la diferencia entre rodaje y edición. Un mal editor puede matar una buena cinta. Aquí es igual.

Es como plantar un árbol. Mientras crece, hay que cuidarlo. Cuando está listo, hay que podar y cortar.

Mi querido Chema Hipólito, cuando le conté que me iba a terminar mi libro a orillas del mar, me dijo "tú sí eres un escritor de verdad", lo cual llenó mi ego durante los cinco minutos en que me lo creí.

Hace poco salía con una chica ingeniero. Cuando se enteró que me llevaba de vacaciones mi powerbook para escribir, le pareció excesivamente nerd. Ya no salgo con ella.

Como sea, estoy de vuelta en la ciudad, con una nueva novela bajo el brazo.

Ya la extrañaba. La ciudad.

viernes, julio 16, 2004

12 Postales desde Puerto Vallarta

La generosidad de Lillyan y Paco Haghenbeck, recientemente mudados a este paraíso, me permitió pasar con ellos unos días en esta playa. Ellos viven en un departamento espléndido que de un lado da a la marina de yates y del otro al club de golf. Intenté sin éxito adelantar la novela que traigo entre manos, pero es imposible trabajar desde la playa. Desde aquí, gracias a los Haghenbeck por su hospitalidad y mucha suerte en la nueva etapa que inician.

1) Puerto Vallarta es un lugar increíblemente limpio. En más de un sentido. Puedes ver pelícanos en el malecón, pescando enfrente del Hard Rock local. La zona roja fue borrada del mapa y no se ve mendicidad. Si no hiciera tanto calor, sería casi el paraíso.

2) Los gringos y canacas acaparan el negocio de los bienes raíces. Y es que esto es casi una sucursal de California. Durante la temporada baja, el lugar está lleno de ancianos norteamericanos que disfrutan del bendito clima. En el verano se regresan a Pennsylvania, Wisconsin, Ontario y todos esos lugares fríos de donde saliueron para darle paso al peor depredador de la zona: el turista.

3) Hay pocos chilangos por aquí. La mayoría de los turistas nacionales son de Guadalajara y Sinaloa.

4) Sobre los gringos residentes, sin duda uno de los más interesantes es Bill Reed, quien me fue presentado por Paco Haghenbeck y es un sujeto fascinante. Militar y espía retirado, trabajó en la marina y recorrió el mundo durante lo más caliente del conflicto bipolar. Estambul, Hungría, Moscú, París, todos esos escenarios de novela de Le Carré. Pero lo mejor del asunto es que el propio Bill, maestro en historia por la Universidad de San Diego, es escritor también. Ha publicado, entre otras cosas, las biografìas de John Huston (de quien fue gran amigo) y de Johnny Weissmuller (sí, Tarzán). Este anciano magnífico está a punto de publicar sus memorias como espía y promete hacer revelaciones candentes sobre la crisis de los misiles en Cuba, entre otras cosas. Un anciano espléndido que vive en el autoexilio mexicano hace 32 años. Gracias por presentármelo, Paco.

5) !Las locales son muy guapas! La combinación de la belleza tapatía con la de las mujeres de la costa es muy afortunada.

6) Lillyan y Paco viven en unos condominios que parecen salidos de una novela de Ballard. Un desarrollo de lujo, situado en el barrio de moda de Vallarta, es un lugar donde no se escucha a la gente que lo habita. Qué imagen tan extraña, aquella de la alberca vacìa en pleno verano ardiente. Un sitio de ensueño, tanto, que no pude màs que avanzar un par de páginas de la novela.

7) En varios de los lugares me hablaban en inglés. Mi tipo mestizo, combinación de árabe con indio no da lugar a confusión, al menos en México (en otros lugares nunca saben de dónde soy). A la mejor me tomaron por cholo. Alguien me preguntó si venía de California (!)

8) Hay más tiendas del Señor Frog´s que bares. La relación en Vallarta es como de 8 a 1.

9) Por cortesía Javier Uribe, hermano de Cinthya Cronopio, cenamos en el Cafe Des Artistes, el lugar más mamón de PV. !Hay que ir de zapatos, no se aceptan jeans! Eso sí, cenamos delicioso, y no fue lo caro que me esperaba. Mejor venir aquí que al Hard Rock o Hooter´s.

10) Un saludo a los Uribe, familia de Cinthya, Javier, Ana, Javier hijo y el tremendo Diego. Gracias por invitarnos a cenar a Lillyan y a mí el primer día (Paco andaba en Los Angeles, llegó después). La siguiente me toca a mí.

11) El detalle triste: las baratijas chinas de importación acabaron con la artesanía local. Ni modo.

12) Pero el punto culminante del viaje fue llegar a una tienda de souvenirs y escuchar a Mamá Pulpa por la radio local.

Si van por allá, no dejen de visitar La Piedra, el negocio de joyería de piedras semipreciosas de los Haghenbeck, sobre la Avenida México, a dos cuadras del hotel Rosita. Un lugar magnífico y nada caro. Cuando vi los precios pensé que serían en dólares sólo para soprenderme que eran en pesos.

Y ahora, si me disculpan, me quedan unos dìas de vacaciones y quiero adelantar algo de trabajo...

jueves, julio 08, 2004

El país se derrumba...

Pero al menos aún tenemos litorales.

Por eso, este humilde ciudadano se va una semana a la playa.

No me busquen, que me desconecto de todo. Nos vemos el 19.

Besitos a las niñas...

martes, julio 06, 2004

La cuenta regresiva
Me voy a la playa el viernes. Mientras tanto, el país se derrumba. En medio de su crisis política más grava (¡y vaya que las ha tenido!), el presidente Fox se enfrenta ahora a su secretario particular, Alfonso Durazo, quien renuncia a su puesto, entre otras cosas, por las diferencias con la mal llamada primera dama.

Yo tengo algunas preguntas al respecto.

1) ¿En qué parte de la ley mexicana se le asigna carácter administrativo alguno a la esposa del presidente en turno, más allá de presidir el DIF nacional?

2) ¿Por qué Durazo, conocido colosista, se fue del PRI y acabó de hombre de confianza del primer presidente panista?

3) ¿Qué diferencia concreta tuvo Durazo con Marta Sahagún? ¿Fue ello lo que provocó su salida?

4) ¿Por qué después de defender como un perro ?metáfora de triste memoria? a su ahora ex jefe y su vieja, de pronto don Alfonso se torna tan crítico, incluso feroz? ¿Estará desafanándose antes de que de verdad explote el gran escándalo, antes de que se arme el gran desmadre?

5) ¿No era precisamente una de las prácticas más repudiadas del viejo régimen ?su pecado original, le llama Durazo en su carta de renuncia? la elección del sucesor del presidente desde los Pinos?

Dicen que las ratas son las primeras en abandonar los barcos que se hunden. Quizá los segundos sean los varios secretarios que han renunciado, empezando por el Güero Castañeda. ¿Serán los terceros los secretarios particulares?

Vaya usted a saber. A mí, todo esto me da muy mala espina, casi puedo esperar lo peor cuando de verdad llegue la hora de la sucesión. Martita sería la primera tapada destapada desde el lecho presidencial.

Y entonces sí, que dios nos agarre confesados.

Y no es que sea misógino, pero...

Aquí va una lista rápida de mujeres estadistas, algunas de ellas bastante tenebrosas:

1) María Estuardo (llamada Bloody Mary por despiadada).
2) La reina Victoria
3) Margaret Thatcher
4) Janet Reno
5) Eva Perón
6) Golda Meier
7) Indira Gandhi
8) Condolezza Rice (bitch!)
9) Corazón Aquino
10) Violeta Chamorro

Y las tres conchitas locales: María de los Ángeles Moreno, Beatriz Paredes y Rosario Robles (qué decepción).

A lo mejor no es tan malo tener una mujer de presidenta
Una mujer sería magnífico. Martita sería lo peor.

Prepotente y sin límites, trepadora y rencorosa, Marta Sahagún potencialmente puede hacerle más daño al país que el mismísimo Salinas. ¿Pues que le dará al señor Presidente? (ni que estuviera tan buena, diría mi compadre Bachan...).

Oh, well...

lunes, julio 05, 2004

El salvaje

No puede uno irse de fin de semana porque a Marlon Brando se le ocurre morirse. ¡Caramba!


Cuenta regresiva

Me voy de vacaciones el viernes. Me largo a una playa en el occidente del país. Ésta será una semana muy laaaaaarga.

jueves, julio 01, 2004

A todos los amigos y lectores de este blog:

Me muero de la pena pero a partir de hoy, jueves, me voy de fin de semana a la casa de los Kimura en Oaxtepec. No me busquen porque de aquí al domingo no habrá teléfonos a la mano.

Ahí se ven.