Ratones verdes

1) LO más importante es saber que la llamada Selección Nacional no representa al pueblo de México. En el mejor de los casos, representa los intereses y manejos de la Asociación Mexicana de Futbol, de los clubes a los que pertenecen los jugadores que la integran y las televisoras y corporaciones a las que pertenecen esos clubes. Pero a mí ni a mi país me representa la tal selección. Hasta donde sé, ni siquiera tiene carácter de oficial.

2) Como he dicho en otras ocasiones, la segunda religión oficial de las escuelas de los hermanos maristas era el soccer. Se endiosaba y apoyaba a aquellos alumnos que tuvieran "potencial"; yo nunca pertenecí a la selección, era tan maleta que los capitanes de los equipos se peleaban por no escogerme. Desde entonces me parece absurdo corretear un balón por una cancha para meterlo en la portería.

3) Las estrellas futboleras de mi escuela jamás llegaron a ligas profesionales. Cosa rara. Lo cierto es que en su mayoría eran sujetos monosilábicos y semianalfabetas (como los propios jugadores, basta escuchar sus balbuceos al pedirles una declaración después de un juego).

4) Pero me queda claro que no puede haber resultados importantes en una competencia global en la medida que el jugador mexicano no sea competitivo en esa escala. Un alto porcentaje de los jugadores argentinos, por ejemplo, juegan en la liga europea, contra dos o tres de los mexicanos (supongo que hay una relación ante la incapacidad de hablar otros idiomas, si con trabajos mascan el español, aunque ni siquiera están colocados en la liga española).

5) Además, cuando un entrenador de la Selección gana un juego (Irán) es un genio, cuando empata (Angola) es un estratega y cuando pierde (Portugal, Argentina) es un pendejo ¡y lo cambian! sin permitir que haya continuidad en el desarrollo del equipo. Ahora la prensa pedirá la cabeza de La Volpe. No hay manera de que así un equipo mejore (imaginen cambiar al gerente de una empresa cada que algo falla).

6) Lo único que agradezco es que se haya terminado todo esto. Ahora a esperar otros 4 años para ver cómo los vuelven a golear en Sudáfrica, si es que califican.

Cuenta regresiva

Pasando a asuntos sin importancia, llegó la hora cero de las elecciones presidenciales y federales (y de gobernador en varios estados). Gabriel Benítez me mandó este link en el que se pueden ver en un cuadro las propuestas de los cinco candidatos a la presidencia, punto por punto. Vale la pena revisarlas con calma para todos aquellos que aún no hayan decidido a quién favorecerán con su voto.

Lo que me parece muy importante es que una vez pasada la elección, evitemos la polarización de nuestro país. Es inevitable que se enciendan los ánimos ante un evento de esta naturaleza, pero gane quien gane la elección, todos tenemos que trabajar por este nuestro tan maltrecho país. Espero que el triunfador tenga la claridad para entender que será necesario un gobierno plural en el que convergan todas las ideologías en un clima de respetuosa pluralidad.