V For Vendetta
Como podrá verse por mi cara de éxtasis, uno de los highlights del viaje a Londres fue coincidir con la premiere de la película V For Vendetta, basada en la novela gráfica que escribió Alan Moore e ilustró David Lloyd a fin de los 80.
Venía caminando por Covent Garden con mi amiga Sumi cuando vi la V flameando a las puertas del cine, y de la nada salieron decenas de tipos vestidos como "V", el protagonista de la historia que lleva una máscara de Guy Fawkes. No lo resistí y le pedí a uno tomarme la foto.]
Pues bueno, anoche, gracias a la invitación de mi amiga Eugenia Robleda, fui junto con la gran Ira Franco a la premiere nacional de la peli.
Grandísima decepción.
Apenas había transcurrido unos cuantos minutos cuando Ira y yo ya estábamos mentando madres, comprendiendo que los hermanos Wachovski sencillamente no habían entendido la profunda carga subversiva del cómic de Alan Moore. Ni una pizca.
No en balde, Moore pidió que su crédito no apareciera en la cinta.
Horror.
Asistimos a la frivolización de una de las mejores historias de la narrativa gráfica que yo jamás había leído. Distorsionado más allá del reconociminento, "V", el elegante terrorista del libro se convierte en un fantoche enmascarado que suelta karatazos y lanza cuchillos, como buen primo cinematográfico que es del Neo de Matrix.
Como queriendo hacer la historia apta para las buenas conciencias y el consumo masivo, la historia fue dejada en los huesos, quitando todo vestigio de pensamiento crítico contra el statu quo para convertirla en una historia camp al estilo de la serie de Batman de los 60.
Ni siquiera el despliegue visual justifica la existencia de este bodrio. Qué poco respeto para la obra original. Era mejor no haber hecho nunca la adaptación al cine.
Lo más triste del asunto es que sin duda será un éxito de taquilla en todo el mundo.
Qué pena. Comparto tu tristeza, Alan...
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