lunes, septiembre 11, 2006

Ciudad Juárez: 25 polaroids

Perdón por tardar tanto en escribir esto, pero me tomó unos días asimilar la experiencia juarense. Va por ahí...

1. Me toca volar del DF a Juárez al lado de un cholo auténtico. Con sus pantalones bombachos, los tatuajes y lentes oscuros. A cada pregunta quele hacía su familia contestaba sólo "simón". No le oí decir otra palabra.

2. Situada en medio del desierto, Juárez no es una ciudad acostumbrada a la lluvia. Los aguaceros recientes, cortesía del calentamiento global tienen desquiciada la vialidad. Ha habido inundaciones y ríos desbordados. Por otro lado, los pocos jardines están verdísimos, lo cual resulta prodigioso para los juarenses.

3. Igual que a Tijuana, Juárez es precedida por su leyenda negra. "Los del Paso piensan que acá todas somos prostitutas y todos asesinos de mujeres", me dice Clara Eugenia Rojas, académica de la UACJ y esposa del ingeniero Armando Gándara, amigo de mi papá desde hace más de 20 años. La realidad es, al menos para mí, una agradable sorpresa. Se trata de una ciudad moderna, llena de vialidades rápidas estilo texano, con gran actividad comercial y gente amistosa y trabajadora.

4. Se come mejor en Juárez que el El Paso. De aquel lado, todo son McDonald's, International House of Pancakes, Wendy's y anexas. Se alcanzan a medio salvar los restaurantes chinos, pero ninguno se compara al Shangri-La juarense, por ejemplo.

5. Las mujeres son muy guapas. Es buena la combinación de las chihuahuenses con lo texano.

6. En el encuentro coincido con varios camaradas escritores, algunos viejos amigos y otros nuevos. Veo con gusto a Armando Alanís, Rocío Cerón, Magali Velasco, Moisés Zamora (con quien comparto habitación), a los magníficos Enrique Romo y Epigmenio León de Tierra Adentro, conozco a los locales José Juan Aboytia y César Silva, entre otros. Hay chance de platicar con Toño Ramos, Glafira Rocha, Monserrat Hawayek,Eve Gil, Luis Jorge Boone (con el que hablé largo y tendido sobre Lovecraft), entre muchos otros. Sé que estoy olvidando mencionar a muchos, les ruego me disculpen la memoria de teflón en este momento...

7. Me toca leer en la biblitoteca central del UACJ y en el Colegio Teresiano. La primera es un recinto magnífico, pero apenas asiste un puñado de gente. En la escuela, leemos ante un grupo de chamaquitos de prepa que preferirían, es evidente, estar en otro lado. Ahí topo a los hermanos Arce, comiqueros locales del proyecto 656 Comics que me regalan un par de los cómics que están produciendo.

8. Sólo en Juárez: Al Cereso (Centro de Readaptación Social) le dicen aquí "el Cherry."

9. Acaso compitiendo con los malls de El Paso, hace unos cuantos se inauguró el centro comercial Las Misiones, gigantesco complejo con todo tipo de comercios que incluyen una tienda Sanrio y una agencia Swatch. Hay quien dice que hasta los Paseños, como los llaman, vienen a comprar aquí.

10. Acá todo mundo tiene una troca o un coche gringo fronterizado. Al igual que el Chuco (que es como llaman los locales a El Paso) Juárez no está hecha para caminar. El servicio de transporte público y los taxis son caros y malos. Se ven pocos peatones.

11. Una aportación juarense a la posmodernidad: la imagen de una tarahumara pidiendo limosna en una esquina con una playera de The Gap.

12. En Misiones conozco a mi colega monero GeMó y su esposa Susy, así como a los muchachos de 656 Cómics, quienes me dan un respiro dentro del encuentro para hablar de mi tema favorito, los cómics. Los chicos me llevan su trabajo, y el alto nivel de su chamba me deja agradablemente sorprendido.

13. No pude probar los burritos, maldita sea.

14. Después de diez años de no visitar los Estados Unidos (sin tomar en cuenta un par de escalas en aeropuertos gringos), visito El Paso. GeMó y Susy me invitan a desayunar al International House of Pancakes para después ir a comprar unos libros al Barnes and Noble.

15. La pasada del puente es tardada. Ya una vez en la caseta, mostramos nuestros pasaportes que un funcionario con cara de mexicano revisa indiferente. "¿A dónde van?", pregunta. "De compras", como todo mundo. Se detiene en mi pasaporte, revisa mi flamante visa. "Pásele."

16. Apenas pasas la caseta, hay bloques de concreto retorciendo el carril para que tengas que avanzar en zigzag, lentamente. La idea es que no puedas salir disparado de la caseta.

17. Al 90 % de los libros de las estanterías de las megalibrerías gringas se les puede aplicar a tábula rasa la ley de Sturgeon, que dice que ese porcentaje de todo lo publicado es basura. Miles y miles de libros sin sustancia, mucho ruido y pocas nueces. Best sellers de choque y frivolidades al por mayor. De entre todo, compro tres libros, controlando mi compulsión bibliómana: dos antologías de cuentos de Joe R. Lansdale y de Bruce Sterling (por cierto, ambos autores texanos) y una novela policiaca, Stalking The Angel de Robert Crais. Los tres libros me tienen fascinado.

18. Una de mis actividades es leer en el consulado mexicano en El Paso, junto con César Silva, Montserrat Hawayek, Héctor Carreto y Dana Gelinas. Ahí me encuentro con Mónica Sánchez Escuer, hermana de Sonia y cuñada de Bachan, que estudia una maestría en creative writing en la Universidad de Texas en El Paso, y con mi tocayo Bernardo Jáuregui. Bernardo es bibliotecario en El Paso y me regala un ejemplar de Dead Eye Dick, novela de Kurt Vonnegut que no tenía, desechada del acervo de la biblioteca del que, me entero, periódicamente se eliminan libros. Horror.

19. Bernardo nos lleva de paseo por su ciudad. Amablemente ofrece su camioneta para ir a buscar tiendas de cómics y una tienda de materiales de dibujo, donde compro unos pinceles de Faber-Castell y un par de cuadernos de dibujo. Después comemos en el Grand China Buffet, restaurante de comida oriental (china, mongola y japonesa) donde me doy vuelo con los nigiri sushis. Yummy.

20. Bernardo vive en un barrio histórico de exiliados porfiristas que huyeron a Texas, lleno de preciosas casas antiguas (una de las cuales habita). Dato curioso, su hogar está en la esquina de las calles Porfirio Días y Miguel Miramón (!).

21. Es tan difícil entrar a los USA y tan fácil regresar a México. Al volver, ni siquiera nos revisan el auto. Podríamos haber venido con la cajuela repleta de drogas o cargando un cadáver...

22. ¿Qué hacen los moneros juarenses un sábado por la noche? Pues graban su podcast, Changolión, al que nos invitaron a GeMó y a mí. Un saludo, muchachos.

23. "Estamos hartas de la gente que viene a hacer turismo académico", me dice durante el desayuna Clara Eugenia. Como decía líneas arriba, es académica de la UACJ, especialista en teorías feministas, con comunicóloga con maestría y doctorado. Cuando le comento que un periodista francés periodista francés amigo mío. "Han lucrado mucho con nosotras", dice refiriéndose a las mujeres de Juárez. "No son muertas", acota, "son asesinadas. Y si no se hubieran muerto, nadie las hubiera volteado a ver." Dato curioso, el comité de las madres de las muertas no participa activamente con las organizaciónes de mujeres. Go figure.

24.Me voy con el deseo frustrado de haber recorrido un poco más la frontera, de ambos lados del río. No cabe duda, como bien dice Barry Gifford, la frontera es un estado mental. Inevitable, evocar la frontera de Canadá con los USA, donde el lado canaca era notablemente más limpio y ordenado, o la de Suiza e Italia, en la que pasando al lado helvecio el pasto parecía como hecho con bloques de Lego.

25. Me voy, esperando regresar pronto. Juárez, una ciudad de contrastes, hermosa y esperpéntica a la vez. A land of confusion. Perseguida por su mito, con el fantasma de la violencia acechando todo el tiempo. Un lugar fascinante.

16 comentarios:

Miguel Cane dijo...

Welcome back, ese.

La verdad es que sí te extrañamos, tanto nosotros como nuestros blogs.

Un abrazo fuerte (de PIT II, que preguntó por ti) y mío.

¡Gustote tenerte de vuelta!

Ernesto Sandoval dijo...

pues sí, welcome back. y yo siempre he querido conocer juárez. hace tiempo tenía un amigo que era de allá y por lo que me contaba siempre se me antojaba.

Paul Medrano dijo...

Uts! pos yo también tengo ganas, nomás que pa'mí está re lejos. Pero bueno, la esperanza muere al último. Saludos y qué bueno que regresó.


Pd-Oiga, le faltó una reseña de lo que queda del mítico Noa-noa, no?, jeje; bueno, yo nomás decía.

Kabeza dijo...

Te repito lo que te decía en el post anterior, no me enteré de tu visita, una lástima. (Estoy a 4 horas de Juárez)
Pronto iré al D.F. Ojalá nos podamos ver.
Saludos.

AC Uribe dijo...

Qué bueno que regresas. Mejor que te acercas. Las fronteras no son sólo tierra de confusión... son en realidad como un hoyo negro que te embruja y te reclama. Vamos, así las vivo yo. Besos.

drneon dijo...

Maestro BEF

Gustazo ver que ha regresado a las posteadas! Le comparto que he logrado publicar mis primeras reseñas. Ojalá pronto se organize una lectura o una conferencia para saludarnos.

El gran Roger Garza le manda saludos. Un abrazo.

yolanda jimenez dijo...

se te extrañaba...

* DJ ZE PEQUENHO * dijo...

pues Simón ese! jo

curioso, aquí en El Salvador, hay zonas que lucen como ciudad fronteriza de méxico. Fast food y Malls al por mayor.

Saludos desde San Salvador BEF.

atte. Ricardo Sif

Alfredo Carrera dijo...

Siempre deleite leerlo.

GEMÓ! dijo...

Bef! Un abrazo fuerte de Susy y tu servidor... maldita sea, porque no se me ocurrio ofrecerte un burrito!. No obstante, como lo he escrito fue un placer tenerte por estos terruños!
Saludos desde este estado mental...Perdon por la pankekas!

María dijo...

Bienvenido de vuelta... en la bienal de foto me topé a una amiga tuya, fotógrafa, te mandó muchos saludos. luego te cuento. Abrazo.

Anónimo dijo...

Hi Mr. Bef:

Tantos y tantos años y yo lo busco, lo busco y no lo busco. Saludos de un amigo perdido en el tiempo.
El Extortugo Ninja Manuel Conde

Anónimo dijo...

Bef, no nos dejes solos tanto tiempo! ;) Besitos

Huemanzín dijo...

Escribe uste tan bonito que se queda uno como burro comiendo olotes, pidiendo mas, saludos :D

Bef dijo...

Mr. Cane: Muchos saludos, me gusta mucho tu blog.

Ernesto: Juárez está para visitarse. No dejes de hacerlo. ¿O será mi fascinación personal con las fronteras?

Paul: Efectivamente, hace pocos años el Noa Noa se incendio, sólo queda un cascarón carbonizado. Gracias por recordármelo.

Kabeza: Pues nos vemos por el DF cuando nos visites.

Cin: ¿A que son fascinantes, las fronteras? Con el asunto de que la mexico-norteamericana es la única donde el primer y tercer mundo se tocan (sin mar de por medio).

Doc: Un saludo al Roger. Gracias por visitarnos.

Yola: Gracias.

Ze Pequenho: Saludos también al Salvador.

Tetera: Gracias, un saludo.

Gemó: saludos a ti y Susy. Lo de las pankekas no fue tu culpa, sino de los pinches gringos.

María: Hola! Ya nos veremos para que me cuentes.

Manuel: Qué gusto! Tantos años...

Olga: Saludos, gracias.

Tocayo: Me vas a hacer sonrojar.

Anónimo dijo...

Juarez es el Tatooine del planeta tierra con todo y creaturas extrañas. Disfrutamos mucho de tu visita al podcast de changolion y esperamos que cuando vuelvas nos avises para darte un tour en ambas fronteras.