Wellcome
Quiero dar la bienvenida a quien es para mí el lector más importante de esto y de todo lo que escriba. Pido disculpas por mantenerlo en el anonimato; él, desde la gerencia de afamada firma, sabe quién es.
viernes, febrero 28, 2003
Últimamente esto parece una columna de política. ¡Basta! Hace falta algo de frivolidad en este blog. Por eso, si yo fuera...
...helado, sería de vainilla.
...coche, sería el batimóvil.
...color, sería azul.
...disco, sería de Nirvana.
...fruta, sería sandía.
...libro, sería de ciencia ficción.
...cómic, sería underground.
...cuadro, sería de Dalí.
...sueño, sería pesadilla.
...otra cosa, sería astronauta
...presidente...
Creo que nunca he querido ser presidente, pero si lo fuera, legalizaría la mota (y mantendría amordazada a mi vieja, ¿verdad, Vicente?).
Hoy, hoy, hoy...
Hoy, pese al Fobaproa, al rescate bancario, al Divino, a Fox, al nuevo PRI, a Elba Eshter Gordillo, a Martha Sahagún, a George W. Bush, a Saddam Hussein, a Tarek Aziz, a Arafat, al peso flotante, a don Paco Gil, al rey del ajo (y la cebolla), a Big Brother 2 y al hecho de estar en bancarrota...
...hace un día estupendo y me siento feliz.
Panem et circens
Parece inevitable hacer referencia al inminente estreno de Big Brother 2. En medio de lo que puede ser el mayor escándalo político de nuestra historia (el primer presidente de la oposición llega a los Pinos financiando su campaña con dinero lavado), no cabe duda que le caerá como anillo al dedo a este gobierno de Fox para distraer la muy difusa atención pública.
En este país no pasa nada mientras haya circo, por que pan...
Lo que no deja de ser paradójico es que el concepto del Gran Hermano, acuñado en 1948 por George Orwell para su novela 1984 sea hoy sinónimo de manipulación de masas y estupidez colectiva. Me pregunto si alguno de los concursantes habrán leido a Orwell alguna vez, pero la respuesta es casi obvia. Si les prohibieran llevar libros a la famosa casa, no les importaría mucho.
Orwell debe estar retociéndose en su tumba.
jueves, febrero 27, 2003
Fidel Velázquez, ese gran rocanrolero
Como si hiciera falta, Vicente Fox vuelve a demostrar su estulticia, esta vez al ir a la CTM a alabar a Fidel Veleazquez y recordarle como "un gran líder sindical".
¿Un gran líder sindical? No ha habido en México ladrón más grande ni pillo más cínico que Fidel Velázquez, auténtico soldado del PRI, siempre al servicio del mejor postor y de un sistema al que construyó para luego sustentar durante más de cincuenta años al frente de la CTM, uno de los más siniestros instrumentos de control que tuvo el estado.
Al paso de las décadas, el sindicalismo charro fue perdiendo fuerza, al tiempo que el estado se achicaba y los tecnócratas neoliberales fueron cortándole las alas a los líderes, empezando con la Quina quien, después de tanta atrocidad y servilismo frente al sindicato petrolero, ahora se quiere vender como un mártir de la lucha democrática y una víctima de Salinas ¡Por favor!
México tuvo dos grandes enemigos durante el siglo XX: Televisa y el PRI. Ahora el primer presidente panista reconoce la labor sindical de este sinvergüenza que con la mano en la cintura cambiaba de bando como de calcetines y cuyas declaraciones de los lunes, al final de sus días, era más de humor involuntario que patéticas.
Las últimas palabras de Fidel Velázquez en su lecho de muerto fueron "No dejen avanzar a la oposición". Apenas unas semanas después, Cuauhtémoc Cárdenas ganaba las primeras elecciones de jefe de gobierno del DF.
Go figure
Como si hiciera falta, Vicente Fox vuelve a demostrar su estulticia, esta vez al ir a la CTM a alabar a Fidel Veleazquez y recordarle como "un gran líder sindical".
¿Un gran líder sindical? No ha habido en México ladrón más grande ni pillo más cínico que Fidel Velázquez, auténtico soldado del PRI, siempre al servicio del mejor postor y de un sistema al que construyó para luego sustentar durante más de cincuenta años al frente de la CTM, uno de los más siniestros instrumentos de control que tuvo el estado.
Al paso de las décadas, el sindicalismo charro fue perdiendo fuerza, al tiempo que el estado se achicaba y los tecnócratas neoliberales fueron cortándole las alas a los líderes, empezando con la Quina quien, después de tanta atrocidad y servilismo frente al sindicato petrolero, ahora se quiere vender como un mártir de la lucha democrática y una víctima de Salinas ¡Por favor!
México tuvo dos grandes enemigos durante el siglo XX: Televisa y el PRI. Ahora el primer presidente panista reconoce la labor sindical de este sinvergüenza que con la mano en la cintura cambiaba de bando como de calcetines y cuyas declaraciones de los lunes, al final de sus días, era más de humor involuntario que patéticas.
Las últimas palabras de Fidel Velázquez en su lecho de muerto fueron "No dejen avanzar a la oposición". Apenas unas semanas después, Cuauhtémoc Cárdenas ganaba las primeras elecciones de jefe de gobierno del DF.
Go figure
domingo, febrero 23, 2003
Feria del libro
Todas las ferias del palacio de minería son iguales. Hasta pareciera que las compañías siempre ocupan el mismo stand en el mismo lugar.
En ellas siempre verás a la misma gente, que básicamente se divide en las siguientes categorías:
-) Empleados de editoriales: atienden los puestos. Sus emociones van del tedio al entusiasmo exagerado. Normalmente no saben más información que el precio de los libros. A veces, como en el stand de Cuba, ni eso.
-) Funcionarios culturales: que van a tomarse la foto.
-) Autores: asisten fundamentalmente para hacer tres cosas, a firmar ejemplares (llevados por su editorial), a dar conferencias o presentar libros y a medir popularidad. Si son famosos, los sujetos descritos en el inciso anterior se les pegan como lapas. Si no, como nos sucede a la mayoría, tienen que formarse y pagar su boleto (bueno, ¿qué son diez varos?)
-) Lectores: ¡Existen! Yo he visto varios.
-) Curiosos variopintos: que van desde los que mandaron de la escuela a los que pasaban por ahí. Son la aplastante mayoría.
viernes, febrero 21, 2003
Sensacional de literatos
Crudos casos de la vida real
El escritor cuarentón: Pues sí, yo me me he dedicado al cuento, la novela, el ensayo...
Yo: Ah... ¿Y cuántos libros has publicado?
El escritor cuarentón: Ninguno.
El escritor mamón: No me interesa la literatura actual. No leo a ningún escritor vivo.
El pobre escritor: He escrito ocho libros, de los cuales siete están inéditos.
El escritor pobre: A mí no me gustan las computadoras, como que me hace falta el contacto directo con el papel (ajá).
El caso perdido: Es que nosotros los poetas...
El pobre diablo: Sí, como digo yo, en mi novela fulana (sigue una autocita, generalmente lamentable, de un libro inconcluso).
El pobre pendejo: Soy escritor, pero casi no leo, mi inspiración es el cine.
jueves, febrero 20, 2003
Hay un millón de usuarios de blogger.com. Un millón de pelados (y peladas, aquí no discriminamos a nadie) compartiendo sus soledades, abriendo las ventanas de su vida e intimidad, como dijo Morcillo, para que se les vea hasta a la hora de ir al baño.
Un millón de ególatras exhibicionistas solitarios.
Somos demasiados.
Ministry, la banda más violenta que ha pisado la tierra, está sonando por la radio. Una auténtica rareza de ésas que sólo sucede a la media noche en Radioativo. Su disco Psalm 69 es una auténtica joya y contiene una de las mejores rolas jamás grabadas: "Jesus Built My Hot Rod". Larga vida a Al Jourgensen y Paul Baker.
(No confundir con Ministry Of Sound).
Ding ding dang dang dang ding dang didi didi dada dadá.
(No confundir con Ministry Of Sound).
Ding ding dang dang dang ding dang didi didi dada dadá.
miércoles, febrero 19, 2003
Muerte sin fin
En menos de una semana, los titulares de los periódicos se han llenado de sangre. No nos podemos quejar, en dos de tres casos se trata de moronga de lujo, muertos de primera. Al empresario y junior profesional Juan Sánchez Navarro le ha seguido hacia la tumba el ex procurador de Sinaloa, Jorge Julián Chávez Castro, y tres mujeres anónimas que una vez más aparecieron en un desierto en las proximidades de Ciudad Juárez.
Lo que une a estos muertos y muertas, que seguramente jamás se conocieron entre sí —aunque nunca se sabe— es el asesinato. La suspensión involuntaria de la vida por un agresor externo. Un empleado, técnico en computación, un gatillero, un asesino múltiple...
¿Qué es de un país cuando los asesinatos ocupan las ocho columnas de sus periódicos? Por lo menos es preocupante.
Quizá lo que hace falta es seguir la receta de Fox y dejar de leer. Ya Ray Bradbury lo decía, hace medio siglo, en Fahrenheit 451 (cito de memoria):
(...) los libros contienen ideas
la lectura de las ideas produce infelicidad
y la obligación de la gente es ser feliz (...)
martes, febrero 18, 2003
domingo, febrero 16, 2003
Sayonara, Oyichan
Hoy he tenido la tristeza de asistir al velorio y cremación de Katsuhiko Hayama Hama, abuelo de David Kimura, mi socio en nuestro despacho, Bésame mucho.
Jamás había estado en un funeral japonés, y debo decir que ha sido una experiencia bellísima y emotiva.
Durante el velorio se exhibe una foto del difunto frente al ataúd, además de colocar fruta fresca, agua y un cuenco de arroz cocido o gohan. Todos los asistentes, al llegar, encienden una varita de incienso que colocan en un incensario de arena y hacen una reverencia. Quienes asisten a la funeraria suelen llegar con dinero en un sobre que entregan a los deudos. Después, las cenizas se besan durante 49 días en la casa del difunto, pues se cree que durante ese período su alma aún mora en su hogar terrenal.
No participé en el rito porque pensaba que estaba reservado a la familia, pero cuando llevaron las cenizas a la capilla, todos los asistentes, amigos y familiares, pasamos a encender una varita de incienso y presentar nuestros respetos al recién partido y los deudos. Debo decir que al momento de hacerlo, guiado por mi amada Sumi Matsumoto, sentí una gran emoción y una paz solidaria con la viuda y familiares del abuelo.
Descanse en paz Don Luis Hayama
viernes, febrero 14, 2003
Muertos de primera y de segunda
Así titula hoy Federico Arreola su editorial en Milenio, respecto al tenebroso caso del asesinato del hijo de Juan Sánchez Navarro. El seguimiento del caso a través de la prensa me hace lanzar al aire una serie de preguntas cuya respuesta no alcanzo a leer entre líneas:
1) ¿Qué debe hacer en la vida alguien, quien sea, cualquier persona, para que un empleado le atraviese el cuello con una pluma y luego rocíe el cadáver con licor para encenderle fuego? ¿Qué dificultades tenían entre ellos? ¿Cómo trataba Juan Sánchez Navarro hijo a sus empleados? (recuérdese el caso de Paco Stanley, ¿qué haces en la vida para que te metan treinta tiros?).
2) ¿Qué se requiere en un país con un rezago en las órdenes de aprehensión mayor al 70% para que se ejerza justicia expedita? ¿Ser hijo de un poderoso empresario, de algún político? ¿Hay muertos de primera y muertos de segunda? ¿Cuántos homicidios se resuelven con esa eficiencia en el Distrito Federal?
3) ¿Quién garantiza la integridad física del asesino dentro de la cárcel? ¿Llegarán el poder y las influencias de la familia de la víctima al interior del reclusorio? ¿Cuánto cuesta mandar matar a alguien en la cárcel?
Preguntas, preguntas que se quedarán en el aire, como tantas otras.
La telera
A veces como en un restaurantito de comida corrida cerca de mi oficina, sobre avenida Coyoacán. "Los arcos", se llama el changarro.
Invariablemente hay tres o cuatro teles encendidas, siempre en el canal de las estrellas.
Todos los días laborables, a esa hora, se transmite una cosa llamada VidaTV.
Es un programa donde una serie interminable de concursantes van a contar chistes, mientras un elenco de animadores los califican. Nunca he visto que nadie se gane nada.
El show es una especie de corte de los milagros, todas las personas que aparecen a cuadro parecen ser deformes de una u otra manera, empezando por una mujer que se hace llamar la Secre, que a todas luces está gozando la cúspide de sus quince minutos de fama. Jason Brunton, un amigo diseñador de Seattle que estuvo trabajando en mi despacho unos meses, la hallaba fascinante. No podía creer que existiera alguien así (claro, los gringos tienen Jackass).
A estas alturas, indignarse de la estupidez televisiva es inútil, ya no digamos snob o francamente patético. La tele nos ha rebasado, y la advertencia que circula por Radioactivo, Apaga la tele, antes de que la tele te apague a tí ha llegado demasiado tarde.
jueves, febrero 13, 2003
miércoles, febrero 12, 2003
Nueve razones para ser misógino
1) Marta Sahagún
Donde se ve que la estulticia sí paga.
2) Paty Chapoy
¿Esto es liderazgo de opinión? Sólo en México.
3) Gloria Trevi
May her bones rot in jail!!!
4) Beatriz Paredes
¿O ya se te olvidó que Salinas la mandó a que le midiera el agua a los camotes en aquello de la reelección?
5) Carmen Salinas
Ver número 2
6) Irma Serrano
¿Puedes ser amante de Díaz Ordaz y luego senadora de izquierda?
7) Lucerito
¿A poco no te dan ganas de tumbarle los dientes a patadas?
8) Yuri
Del atasque al cristianismo a la grilla. Yeah, right.
9) Elba Esther Gordillo
Sin comentarios.
martes, febrero 11, 2003
lunes, febrero 10, 2003
El viejo tío Bill
El libro que me llevé a la playa fue Junky, primera novela de William Seward Burroughs, escrita parcialmente en la ciudad de México durante la estancia del autor en nuestro país (1949-1952) en su huida de las leyes norteamericanas. El libro fue originalmente firmado con el seudónimo de William Lee, alter ego que el viejo junky utilizaría por el resto de su vida.
Burroughs es un autor desconcertante en más de un sentido. Homosexual y adicto a las drogas, fue el nieto del inventor de la máquina sumadora Burroughs (hoy Unisys), lo cual le permitió ser un junior toda su vida (entre otras cosas, jamás trabajó).
El viejo Burroughs —no conozco foto de él donde no se vea ruco, ni siquiera aquellas de cuando era niño— está sin duda emparentado, aunque sea circunstancialmente, con los beatniks, siendo Ginsberg y Kerouac cercanos amigos suyos, del mismo modo que necesariamente converge en no pocos puntos (homosexualidad, adicciones, sordidez, Tánger) con Jean Genet, quien pareciera ser su contraparte francesa.
Sin embargo, WSB parece ser un autor aislado, un escritor sin pasado como diría Guillermo Fadanelli, cuya tradición inicia y termina con él mismo. En Burroughs, el personaje parece devorar a la obra, que a su vez engulle al autor como una eterna serpiente uroboros (¿se escribe así?), imposible de disociar, incomprensible una de la otra. No es posible leer a Burroughs ignorando que mató a su esposa de un tiro jugando su rutina de Guillermo Tell en un departamento de la colonia Roma. No se entiende en su totalidad el impacto de sus imágenes sin saber sobre su estancia en Marruecos, inyectándose heroína y fumando kif.
Los libros de William Burroughs fueron algunas de las lecturas más apasionadas de mi adolescencia tardía. Sin embargo, a la vuelta de diez años descubro que no siempre logra trascender su propio mito, que de repente puede ser tan decadente como un Elvis Presley gordo en su última temporada en Las Vegas.
No obstante, lo adoro.
domingo, febrero 09, 2003
De vuelta a la civilización (?) después de cinco días tumbado en una hamaca.
Nexpa es un playa virgen, a medio camino entre Lázaro Cárdenas (busquen en el diccionario la entrada puerto ojete. Verán que la definicion es "Lázaro Cárdenas") y Maruata. Una joya.
Si el cielo existe, es una playa como ésta.
miércoles, febrero 05, 2003
lunes, febrero 03, 2003
Uno de los pueblos texanos sobre los que llovieron restos carbonizados del transbordador espacial es Nacogdoches, TX. Un nombre así es difícil de olvidar (sólo comparable con la ciudad de Falfurrias, en el mismo estado).
Aparte de la fugaz fama que tendrá como receptáculo de basura espacial y peedacería carbonizada de astronautas, Nacogdoches es el pueblo natal del inclasificable escritor Joe R. Lansdale.
Prácticamente desconocido en castellano, y creador de un corpus que desafía las etiquetas genéricas, Lansdale es uno de los talentos más bizarros (en las acepciones inglesa y castellana del término) del ghetto de los subgéneros literarios. Ha escrito historias de terror, de horror sobrenatural, novela negra y cosas que sólo pueden ser descritas como vintage Lansdale.
Además de todo, inventó un arte marcial cuyo dojo se encuentra en Nacogdoches.
Si no los has leido, aquí está tu oportunidad: www.joerlansdale.com.
Aparte de la fugaz fama que tendrá como receptáculo de basura espacial y peedacería carbonizada de astronautas, Nacogdoches es el pueblo natal del inclasificable escritor Joe R. Lansdale.
Prácticamente desconocido en castellano, y creador de un corpus que desafía las etiquetas genéricas, Lansdale es uno de los talentos más bizarros (en las acepciones inglesa y castellana del término) del ghetto de los subgéneros literarios. Ha escrito historias de terror, de horror sobrenatural, novela negra y cosas que sólo pueden ser descritas como vintage Lansdale.
Además de todo, inventó un arte marcial cuyo dojo se encuentra en Nacogdoches.
Si no los has leido, aquí está tu oportunidad: www.joerlansdale.com.
Los Ramones muertos
¿Por qué no hay ninguna banda postpunk con ese nombre?
Como sea, resulta que Illán Ramón, el astronauta muerto en el accidente del Columbia, era un judío practicante que entre otras cosas había llevado al espacio un dibujo titulado "Paisaje lunar", dibujado por un niño preso en un campo de concentración nazi en 1942. También una copia de la Torah que perteneció a otro sobreviviente del holocausto, en lo que resulta un ser acto simbólico de la victoria de la esperanza sobre la crueldad humana durante el exterminio hace sesenta años. Lo curioso es que me resulta extrañamente conmovedor ¡y yo no soy judío!
Al momento de morir, el otro Ramón muerto, Joey Ramone, escuchaba el último disco de U2, lo cual habla muy mal de sus gustos musicales (quiero pensar que era una secuela del tratamiento que recibía por el cáncer).
Lo último que debió haber escuchado Illán Ramón debió haber sido un estruendo ensordecedor.
Y luego, nada.
¿Por qué no hay ninguna banda postpunk con ese nombre?
Como sea, resulta que Illán Ramón, el astronauta muerto en el accidente del Columbia, era un judío practicante que entre otras cosas había llevado al espacio un dibujo titulado "Paisaje lunar", dibujado por un niño preso en un campo de concentración nazi en 1942. También una copia de la Torah que perteneció a otro sobreviviente del holocausto, en lo que resulta un ser acto simbólico de la victoria de la esperanza sobre la crueldad humana durante el exterminio hace sesenta años. Lo curioso es que me resulta extrañamente conmovedor ¡y yo no soy judío!
Al momento de morir, el otro Ramón muerto, Joey Ramone, escuchaba el último disco de U2, lo cual habla muy mal de sus gustos musicales (quiero pensar que era una secuela del tratamiento que recibía por el cáncer).
Lo último que debió haber escuchado Illán Ramón debió haber sido un estruendo ensordecedor.
Y luego, nada.
El chiste de la semana, creación de Gerardo Sifuentes:
"¿Supiste que se murió otro de los Ramones?"
"No mames, están cayendo como moscas. ¿Cuál fue?"
"Illán Ramón, el astronauta del Columbia."
Fanfarrias.
"¿Supiste que se murió otro de los Ramones?"
"No mames, están cayendo como moscas. ¿Cuál fue?"
"Illán Ramón, el astronauta del Columbia."
Fanfarrias.
Los extras
Están en todos lados, en todas las fiestas, en todas las inauguraciones, en todas las galerías, en todos los bares de moda y desde luego,en todas las banquetas de la Condesa.
Son ellos, los has visto miles de veces, nunca te los han presentado, lo cual no importa porque siempre estarán ahí. Son amigos del primo del vecino del cantante de Café Tacuba, de la sobrina de algún creativo de Coca-Cola en McCann-Erickson, ex niños actores o redactores de la sección de horóscopos de Notitas musicales.
Ello, por supuesto, no les evita poder presumir sobre sus amistades famosas y exitosas, alardear de la gran película que dirigirán/escribirán/producirán en algún punto indeterminado del futuro, referirte su experiencia con la droga de moda ("esos poppers, güey... no mames, delicioso"), hablarte con citas y todo de la gran novela mexicana que están a punto de terminar tras haber trabajado en ella durante siete años o dar una cátedra magistral sobre lo más reciente del cine independiente de Finlandia, por no hablar de su talento natural para ser DJs.
Y por alguna extraña razón, todos ellos son creativos de publicidad, miembros del staff de editorial Televisa, asistentes de directores de comerciales, escritores jamás publicados, actrices/actores de reparto en obras independientes montadas en algún forito en Coyoacán, genios del diseño o fotógrafos.
Los extras. Sin ellos, los restauranteros y dealers de coca de la Condesa estarían en la miseria.
Y las fiestas, desiertas.
(Claro que, pensándolo bien, todos en algún momento hemos sido extras. Además, si todas esas novelas/películas/obras de arte se produjeran e hicieran públicas, el mundo sería insoportable).
Están en todos lados, en todas las fiestas, en todas las inauguraciones, en todas las galerías, en todos los bares de moda y desde luego,en todas las banquetas de la Condesa.
Son ellos, los has visto miles de veces, nunca te los han presentado, lo cual no importa porque siempre estarán ahí. Son amigos del primo del vecino del cantante de Café Tacuba, de la sobrina de algún creativo de Coca-Cola en McCann-Erickson, ex niños actores o redactores de la sección de horóscopos de Notitas musicales.
Ello, por supuesto, no les evita poder presumir sobre sus amistades famosas y exitosas, alardear de la gran película que dirigirán/escribirán/producirán en algún punto indeterminado del futuro, referirte su experiencia con la droga de moda ("esos poppers, güey... no mames, delicioso"), hablarte con citas y todo de la gran novela mexicana que están a punto de terminar tras haber trabajado en ella durante siete años o dar una cátedra magistral sobre lo más reciente del cine independiente de Finlandia, por no hablar de su talento natural para ser DJs.
Y por alguna extraña razón, todos ellos son creativos de publicidad, miembros del staff de editorial Televisa, asistentes de directores de comerciales, escritores jamás publicados, actrices/actores de reparto en obras independientes montadas en algún forito en Coyoacán, genios del diseño o fotógrafos.
Los extras. Sin ellos, los restauranteros y dealers de coca de la Condesa estarían en la miseria.
Y las fiestas, desiertas.
(Claro que, pensándolo bien, todos en algún momento hemos sido extras. Además, si todas esas novelas/películas/obras de arte se produjeran e hicieran públicas, el mundo sería insoportable).
sábado, febrero 01, 2003
Diez libros que nadie debería dejar de leer:
1) Barbazul, de Kurt Vonnegut
2) Vineland, de Thomas Pynchon
3) Sin novedad en el frente, de un cabrón cuyo nombre siempre se me olvida
4) El gen egoista, de Richard Dawkins
5) Poeta ciego, de Mario Bellatin
6) Una temporada en el infierno de Arthur Rimbaud o Los cantos de Maldoror del Conde de Lautremont (considérenlo un empate técnico)
7) A sangre fría, de Truman Capote
8) Días y noches de amor y guerra, de Eduardo Galeano
9) Historias de cronopios y famas, de Julio Cortázar (¡WOW!)
10) Cualquier cosa de Philip K. Dick (bueno, casi)
1) Barbazul, de Kurt Vonnegut
2) Vineland, de Thomas Pynchon
3) Sin novedad en el frente, de un cabrón cuyo nombre siempre se me olvida
4) El gen egoista, de Richard Dawkins
5) Poeta ciego, de Mario Bellatin
6) Una temporada en el infierno de Arthur Rimbaud o Los cantos de Maldoror del Conde de Lautremont (considérenlo un empate técnico)
7) A sangre fría, de Truman Capote
8) Días y noches de amor y guerra, de Eduardo Galeano
9) Historias de cronopios y famas, de Julio Cortázar (¡WOW!)
10) Cualquier cosa de Philip K. Dick (bueno, casi)
Escribo.
Es más fácil decir que soy escritor a decir que soy diseñado gráfico. A la banda le queda más clara la primera actividad. Además, se ve muy bonito en las formas de migración: Occupation: writer.
"What kind of books do you write?", suelen preguntar los agentes de migración, que de otra forma serían hoscos y malencarados. "Children books. And science fiction novels", contesto invariablemente. Siempre en ese orden.
Una vez, abandonando Marruecos, un par de funcionarios me preguntaron en inglés que si no traía algún libro mío que les regalara. Me sorprendió mucho, pues a todas luces no sería un texto que pudieran entender bien (aunque con tal de chingarte algo, esos burócratas marroquíes son capaces de lo que sea.
Ocupación, escritor. Escritor de novelas de ciencia ficción
Es más fácil decir que soy escritor a decir que soy diseñado gráfico. A la banda le queda más clara la primera actividad. Además, se ve muy bonito en las formas de migración: Occupation: writer.
"What kind of books do you write?", suelen preguntar los agentes de migración, que de otra forma serían hoscos y malencarados. "Children books. And science fiction novels", contesto invariablemente. Siempre en ese orden.
Una vez, abandonando Marruecos, un par de funcionarios me preguntaron en inglés que si no traía algún libro mío que les regalara. Me sorprendió mucho, pues a todas luces no sería un texto que pudieran entender bien (aunque con tal de chingarte algo, esos burócratas marroquíes son capaces de lo que sea.
Ocupación, escritor. Escritor de novelas de ciencia ficción
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